La presión a la que se someten algunos estratos puede hacer que se rompan y se desplacen las rocas.

A estas estructuras las denominamos fallas. Los elementos de una falla son:

  • Plano de falla o zona por donde se desliza un bloque con respecto al otro. Coincide con la superficie de fractura sobre la que se produce el desplazamiento.
  • Labios de falla. Son cada uno de los bloques que se desplazan. Si el desplazamiento es en la vertical el labio elevado es el bloque superior y el labio hundido es el inferior.
  • Salto de falla. Es la distancia que se han desplazado dos puntos que estaban unidos antes de la fractura. Se puede medir tanto horizontal como verticalmente.
  • Escarpe de falla. Es la separación de los bloques que aparece en el terreno y que tiende a desaparecer por la erosión.

Las fallas, según la posición del plano de falla y el sentido de desplazamiento de los bloques pueden ser:

  • Falla normal o directa o de gravedad. Se originan por fuerzas de distensión, cuando el plano de falla se inclina hacia el labio hundido, por hundimiento del bloque más bajo. Un caso especial es la falla vertical, en que el plano de falla es vertical y por lo tanto su buzamiento de 90°.
  • Falla inversa. Se origina por fuerzas de compresión, cuando el plano de falla se inclina hacia el labio elevado, por elevación del bloque que se apoya en él. En el caso de que el plano de falla esté casi horizontal, el bloque elevado cubre gran parte del hundido y se origina un cabalgamiento.
  • Falla en dirección o de desgarre u horizontal. Producida cuando el desplazamiento de los labios únicamente es horizontal, no hay desplazamiento vertical. Sin embargo, el plano de falla puede ser vertical o inclinado.
  • Falla rotacional o en tijera. Consiste en que uno de los labios realiza un movimiento de giro con relación al otro, alrededor de un punto fijo. En estas fallas, el escarpe es mayor cuanto más alejado se está del punto de rotación.

Al igual que los pliegues, las fallas forman sistemas de fallas que asemejan una especie de escalera y que origina dos importantes accidentes tectónicos:

  • Horst. Es un sistema en el que existe un bloque central elevado a partir del cual se disponen el resto de bloques escalonadamente en sentido descendente. En la imagen puedes ver un pequeño horst. El bloque levantado es el central. Las fallas que se forman en un horst son de tipo normal.
  • Graben. Es un sistema en el que existe un bloque central deprimido a partir del cual se disponen el resto de bloques escalonadamente en sentido ascendente. Las fallas que delimitan la fosa son de tipo inverso.
Las diaclasas son fracturas en la roca en los que no existe aparentemente un desplazamiento. Se pueden producir por esfuerzos compresivos y distensivos. Su origen también puede ser no tectónico.

La principal causa de los terremotos son los esfuerzos tectónicos generados por la dinámica litosférica. Las principales zonas en las que se originan terremotos y sus características son:

  • Dorsales y zonas de rift intracontinental. En esta zona la sismicidad es superficial y poco importante. se debe a esfuerzos distensivos.
  • Zonas de subducción. En esta zona la sismicidad se presenta a diferentes profundidades. A poca profundidad se produce por cizalladuras en las rocas, a profundidad intermedia por esfuerzos distensivos relacionados con la subducción y a gran profundidad están originados por esfuerzos compresivos y distensivos.
  • Zonas de fallas transformantes. Los terremotos se generan en profundidades medias y bajas.
  • Zonas de intraplaca. Están asociados a los sistemas de fallas generados por la obducción, puntos calientes o fallas originadas en dorsales y rifts abortados (aulacógeno).