La filosofía medieval europea estuvo muy marcada por las luchas que se dieron entre los dos grandes poderes,  papado e imperio. A partir del siglo X, la polémica entre fe y razón era la cara filosófico-teológica del debate político entre los defensores del poder papal, que pensaban que la filosofía era una  sierva de la teología, y los que abogaban por el emperador,  quienes sostenían que la filosofía se imponía sobre la fe. El problema es discernir cuál es la relación entre el conocimiento (más…)