El Reformismo Cultural en España: De los Novatores a la Ilustración

El **reformismo cultural** en España se gestó a partir de las ideas que comenzaron a introducirse en el último tercio del siglo XVII, marcando la poesía y la prosa tanto en su forma como en su contenido. Esta filosofía se fue enriqueciendo hasta cuajar en 1760, dando origen a lo que conocemos como **filosofía moderna** y, a partir de esa fecha, como **filosofía de la Ilustración**.

Entre 1680 y 1750, la modernización ideológica, tal como se implantó en España, no puede considerarse todavía ilustrada, porque en estos ochenta años se habla de la filosofía de los **Novatores**: los innovadores. Los introductores de la filosofía moderna querían innovar y reformar el sistema intelectual que venía funcionando desde el siglo XIII con **Santo Tomás de Aquino**: la **escolástica**. El sistema escolástico estaba fundado en el **aristotelismo**. Por tanto, ya en la **Edad Media** y desde el **Renacimiento**, hubo autores que quisieron romper con esto, tanto en el terreno natural como en el humano. Dicha ruptura dio lugar al **humanismo** o **Renacimiento**, con figuras como **Juan Luis Vives**.

En España, hasta mediados del siglo XVII, los autores se enfrentaron a un problema importante: la **intolerancia religiosa**. Tanto fue así que los problemas se vieron agravados a partir del **Concilio de Trento** y la **Reforma Católica**. La renovación quedó cortada en la segunda mitad del siglo XVII y principios del XVIII. Desde la muerte de **Felipe IV**, España entró en decadencia hasta la llegada de **Carlos III**. Así se empezó a considerar esta época como un fenómeno cultural y literario nuevo, donde se buscaba un **conocimiento racional y empírico** del mundo.

Protagonistas y Tertulias de la Modernidad

Entre los autores que se reunían en las tertulias para desarrollar la filosofía moderna, encontramos a **Francisco G. R.**, más conocido por su título nobiliario como **Fernán Núñez**, quien publicó en 1687 El hombre práctico, una obra humanista que consistía en un tratado de educación para príncipes y que tenía su modelo en **Erasmo de Rotterdam**. Además, también remite al autor griego **Plutarco**. El siglo XVIII es el siglo del **enciclopedismo** y la formación en círculo. Hay un activismo intelectual donde todos los saberes están ligados y no existe una especialización.

**Juan de C.**, con su libro Carta filosófica, médico-chymica (1686), es una defensa de la filosofía racional y empirista. Defendía el conocimiento basado en la experiencia desde un campo como era la medicina. Realizó sus avances desde un contexto cultural-patriótico y pensaba que la escolástica iba en detrimento y que llevaba a la decadencia, poniendo a sus seguidores a la altura de los indios de América. Además, fue un agitador cultural que planteó la reforma filosófica dentro de un marco político. Por tanto, C. pidió instituciones.

Sin embargo, entre 1680 y 1690, hubo reuniones no institucionalizadas: tertulias donde se desarrolló la labor de los **Novatores**. Los Novatores comenzaron realmente a operar en 1714 y contaban con la filosofía de autores de la **Revolución Científica** como **Newton**, **Descartes**…, a quienes leían de forma clandestina en las tertulias defendidas por los nobles. La primera fue la **Real Sociedad de Medicina de Sevilla** en 1700, de marcado signo reformista, donde tenían cabida todos los hombres de ciencias y letras. No obstante, destacaron las de Madrid, Valencia, Sevilla y Barcelona.

En esta sociedad se encuentra **José Ortega Barrera** con La antorcha filosófica (1689), donde habló del concepto intelectual: la luz del entendimiento, un concepto simbólico que marcará los siglos XVIII y XIX y culmina en la Ilustración.

**Diego Mateo Zapata** fue médico y fundador de la institución mencionada anteriormente. En unos escritos sobre filosofía y medicina, expuso unas cuestiones cosmológicas peligrosas: la defensa del **atomismo** frente al concepto aristotélico tradicional. Él era seguidor de **Descartes** y sus planteamientos eran considerados heréticos por parte de los escolásticos. Debido a ello, en 1714, **Francisco Palanco** escribe en latín unos diálogos contra la filosofía de los Novatores. Pero Zapata responde con Diálogos filosóficos en defensa del atomismo, con una censura del prólogo firmada por **Alejo de Abendaño**, tras el que se escondía el fraile **Juan de Nájera**, defensor del atomismo, pero cristianizado.

Destaca la tertulia del **Marqués de Villena**, donde se fundó la **RAE** (Real Academia Española), ya que los Novatores se preocupaban también por el lenguaje. Antes de ser apresado por su polémica con Palanco, escribió Ocaso de las formas aristotélicas.

Otro Novator fue **Martín Martínez**, quien continuó con la línea escéptica, tanto que escribió Filosofía y medicina escéptica (1730).

Por último, **Benito Jerónimo Feijoo** fue el primer autor intelectual que tuvo éxito comercial en España. En 1726, publica Teatro Crítico Universal, obra que estuvo caracterizada por su alcance enciclopédico, excepto teología y política, que era el límite autoimpuesto por los Novatores. Los rasgos de su obra son:

  • La búsqueda de una escritura natural que no se guíe por las pautas de la retórica ingeniosa, pues intentaba proponer la verdad.
  • Su intención era desengañar de los errores comunes. Este desengaño tenía su tradición en la obra de **Juan de Zabaleta**, Errores celebrados.
  • No solo desengañar de los errores intelectuales, sino también de todo el comportamiento social. Por ejemplo, aduce que las prácticas religiosas colectivas, como las procesiones o romerías, son un modo supersticioso de vivir la religión.

Esta línea de obras para desengañar de los errores se conoce como **“literatura mixta”**, porque en ella caben todos los saberes del momento. Así, observamos en 1540 la Silva de varia lección de **Pedro Mexía**, que ofrecía una “selva” de las lecturas que él consideraba importantes para un lector medio de su tiempo. Luego, el Teatro Crítico muestra un panorama de las lecturas de su tiempo, pero se diferencia en que va más allá del mundo erudito y literario, ya que se interesa por el comportamiento social y la mentalidad del pueblo.

La Corriente Ecléctica y el Neohumanismo

Los **Novatores eclécticos** o **neohumanistas** querían reformar el sistema literario, pero sin romper del todo con la tradición. Los principales Novatores de la corriente ecléctica proceden de las tertulias valencianas y son:

  • **Juan Bautista Corachán**, que escribió Avisos del Parnaso y toma su modelo retórico de la literatura humanista. El Parnaso es una metáfora de las tertulias y Corachán recoge lo que allí se debatía (1680). Él y **Tosca** intentan conciliar la tradición y la novedad desde su posición como profesores universitarios.
  • **Gregorio Mayans** es el autor principal de este neohumanismo. Entendía que la literatura española estaba en decadencia porque no se cuidaba la lengua, e intenta restaurar la pureza del latín y de la lengua recurriendo a los autores del **Buen Decir** como **Fray Luis de Granada y León** o **Quevedo**. Publica una serie de obras, la primera en 1727, Oración que exhorta a seguir la verdadera idea de la elocuencia española, y después El orador cristiano, donde profesa un concepto historicista de la lengua. Dentro de esta reforma, tenía importancia la imitación de modelos, y Mayans reconstruye la vida y obra de ellos. También se preocupó por el conocimiento de la historia de España y, debido a ello, surgió su aportación del concepto **“Siglo de Oro”** para crear una clasificación historiográfica.

Fenómenos Clave: Crítica Literaria y Prensa

En este siglo se dieron dos fenómenos: la **crítica literaria**, que es lo que a su modo pretendían **Mayans y Feijoo**, y la creación de un conocimiento exacto y depurado del pasado de España. Dentro de esta preocupación, surge la Bibliotheca Hispana vetus/nova de **Nicolás Antonio**.

El otro fenómeno es el de la **prensa**. Desde 1665, todo el reformismo cultural que ha dado lugar a la modernidad se ha encauzado a través de la prensa. En esa fecha se publica en París Journal des Savants, que sería el modelo que imitaría España con El Diario de los Literatos. Este no estaba compuesto por artículos de opinión, sino por reseñas de libros. Además, hicieron suyas las directrices de los Novatores, y junto con los criterios del racionalismo y empirismo, crearon la crítica literaria.

A partir de 1760, con **Carlos III**, se instaló el **despotismo ilustrado**, pues entonces el régimen absolutista se preocupaba por la educación del pueblo. Las figuras más representativas en este mundo recién iniciado de la prensa fueron **J. E. de Graef** y sus Discursos mercuriales, donde se incluyeron artículos de opinión pública y social. A él se le suma en 1770 el periódico El Pensador de **José Cadalso y Fajardo**, que ofrece un nuevo modelo de prensa dirigida al público general con ánimo crítico-reformista. En último lugar, ya en los años 80, **Luis García del Cañuelo** y **Manuel Pereira** inician El Censor, donde trataban aspectos del gobierno, ya que tenían su permiso y el del rey.